Un nuevo estudio publicado recientemente en la American Journal of Preventive Medicine muestra que la raza y la orientación sexual son factores importantes para determinar la prevalencia de uso de cigarrillos electrónicos entre los jóvenes en los Estados Unidos. Al analizar los datos recopilados entre 2015 y 2019 de más de 38,000 estudiantes de secundaria en los Estados Unidos, el estudio encontró que las diferencias de raza, etnia y orientación sexual tienen un impacto en la probabilidad de que los adolescentes vapeen.
Estudios anteriores estiman que aproximadamente la mitad de los estudiantes de secundaria en el país han intentado vapear al menos una vez. Al mismo tiempo, alrededor de un tercio de todos los adolescentes del país que han probado el vapeo usan cigarrillos electrónicos con regularidad. Según los Centros para el Control y la Prevenciòn de Enfermedades ( CDC ), , la cantidad de estudiantes de secundaria que usan cigarrillos electrónicos creció más de un 1000 % en 2020 a un 26.5 % frente al 2.4 % en 2019.
El problema con estas estadísticas es que la nicotina que se encuentra en los productos de tabaco, incluidos los cigarrillos electrónicos, es altamente adictiva. Esto significa que una vez que los adolescentes experimentan con los cigarrillos electrónicos, fácilmente pueden volverse adictos a estos productos y están en un mayor riesgo de convertirse en fumadores habituales de cigarrillos. Esto es lo que informó a los investigadores a investigar más a fondo el problema del vapeo e identificar los factores de riesgo para diferentes grupos de adolescentes.
El estudio realizado por el becario postdoctoral de la Facultad de Medicina de la Universidad de Yale, Juhan Lee, y el profesor asociado de la Facultad de Comunicación de Annenberg, Andy Tan, buscaron completar más información sobre la "prevalencia del vapeo entre joven personas en las intersecciones de más de una identidad minoritaria”. Fiel a su misión, el estudio proporcionó hallazgos importantes sobre la prevalencia de los cigarrillos electrónicos entre los adolescentes heterosexuales y lesbianas en comparación con los grupos raciales cruzados.
El estudio encontró que los cigarrillos electrónicos eran más frecuentes en las niñas lesbianas negras (18.2 %) que en las niñas heterosexuales negras (7.1 %). De manera similar, el uso de cigarrillos electrónicos fue más frecuente en niñas lesbianas multirraciales (17.9 %) que en niñas heterosexuales multirraciales (11.9 %). Sin embargo, la prevalencia del uso de cigarrillos electrónicos entre las niñas lesbianas blancas fue menor (9.1 %) que entre las niñas heterosexuales blancas (16.1 %). No hubo diferencias significativas entre los diferentes grupos de chicos.
Estos hallazgos parecen estar de acuerdo con estudios previos que demostraron que el uso de cigarrillos electrónicos era mayor entre las lesbianas. Se cree que usan productos de cigarrillos electrónicos como un mecanismo para hacer frente al estrés relacionado con su orientación sexual. Por lo general, los jóvenes homosexuales enfrentan más estrés en la sociedad. Esto se debe particularmente a que son discriminados o intimidados.
También existe una marcada diferencia entre los niveles de prevalencia entre niños y niñas. Hay una gran disparidad entre niñas y niños. Los autores de este estudio creen que se debe a la comercialización de productos de cigarrillos electrónicos dirigidos a mujeres homosexuales. Estudios anteriores muestran que las mujeres bisexuales negras e hispanas reportan una mayor exposición a los anuncios de productos de tabaco que las mujeres heterosexuales blancas. Tan uno de los autores de los estudios dice que “Durante años, la industria tabacalera ha dirigido el marketing hacia grupos tradicionalmente marginados, ya sea en clubes, bares, eventos del Orgullo o a través de revistas”. Él espera que el hallazgo de este estudio se utilice como trampolín para otros estudios que ayuden a resolver los problemas relacionados con el consumo de tabaco entre los jóvenes.
