Algunos fabricantes de cigarrillos electrónicos y otros productos de vapeo los comercializan como si fueran el reemplazo perfecto de los productos de tabaco tradicionales. La mayoría de los mensajes están orientados a demonizar los productos de tabaco tradicionales, como los cigarrillos, mientras se glorifican los cigarrillos electrónicos.
Con el mayor acceso a los productos de vapeo, los promotores deben revisar sus mensajes. La mayoría de los productos de vapeo son de colores brillantes, no producen humo, contienen muchos sabores diferentes y ayudan a los adictos a dejar de fumar. Esto los hace más atractivos, especialmente para la generación joven.
El gobierno de inglaterra tiene productos de vapeo en sus planes para ayudar a los fumadores a dejar de fumar y hacer que el país esté libre de fumar para 2030. Esto llama la atención sobre el impacto que los productos de vapeo pueden tener en las personas. ¿Son 100% seguros para todos?
Para empezar, todos los productos de vapeo aún contienen algo de nicotina y otros compuestos que se encuentran en sus productos de tabaco tradicionales. Esto significa que vapear puede ser tan adictivo como fumar. Tomemos el caso de Izzy Esposito, nativa de Borehamwood de 18 años. Empezó a vapear hace un año y ahora está enganchada. Vapea todo el día y cuando no lo hace no deja de pensar en ello.
Ella dice: "Puedo simplemente sentarme en la cama y vapear y estar en Facetime con mis amigos al mismo tiempo".
Las cosas empeoraron para ella en algún momento en que estaba usando dos vaporizadores a la semana. Eso es alrededor de 7,000 bocanadas. Pero como muchos otros adultos jóvenes y adolescentes mayores, tuvo que aprender por las malas que vapear demasiado puede dañar su cuerpo.
Su boca y labios se llenaron de llagas y sus encías comenzaron a sangrar hasta el punto de que ni siquiera podía cepillarse los dientes debido al dolor. Esto la llevó a reevaluar sus patrones de vapeo y se vio obligada a reducir el vapeo. Desafortunadamente, Izzy no está sola. Miles de otros adultos jóvenes en toda Inglaterra han tenido la misma experiencia.
Los vaporizadores desechables son baratos y fáciles de usar. Esto los hace bastante atractivos para las generaciones más jóvenes. Además, los aromas los hacen aún más atractivos. La asequibilidad de los vaporizadores desechables y los muchos sabores con los que uno puede experimentar los hace bastante adictivos para la generación más joven. Izzy dice que vapea más de lo que ha fumado en su vida. Esto no es exclusivo de ella sola. Más jóvenes en todo el país informan que vapean más que fuman.
Esto no es para desacreditar el hecho de que el vapeo ha ayudado a millones de británicos a dejar de fumar en la última década. Pero los cigarrillos electrónicos y otros productos sin humo aún contienen trazas de nicotina y otros compuestos que pueden ser dañinos para la salud de los usuarios. Muchos están de acuerdo en que estos productos no son 100% seguros y los científicos pronto descubrirán los peligros que representan.
El profesor John Britton de la Universidad de Nottingham fue uno de los asesores del gobierno en su informe para dejar de fumar en el país. Él cree que no es cierto decir que vapear es más seguro que fumar. Él dice que se trata de equilibrar los riesgos. Él cree que las personas tardarán entre 40 y 50 años en comenzar a ver los impactos negativos del vapeo.
La buena noticia es que el Reino Unido todavía tiene una pequeña cantidad de vapeadores adolescentes en comparación con otros países. Estudios recientes del University College London (UCL) muestran que alrededor de 74,000 adolescentes entre 16 y 17 años en Inglaterra usan cigarrillos electrónicos.
Sin embargo, sus otros estudios muestran que el número de vapeadores entre los jóvenes de 18 años está creciendo.
La profesora Linda Bauld, de la Universidad de Edinburg, cree que, si bien muchos adolescentes del país experimentan con los cigarrillos electrónicos, muchos no se vuelven adictos debido a las estrictas regulaciones sobre la comercialización y la cantidad de nicotina en esos productos. Ella cree que todavía se necesita más para proteger a los jóvenes.
El profesor David Thickett de la Universidad de Birmingham realizó un estudio que imitaba el vapeo en un laboratorio. El estudio encontró que el vapeo causa inflamación y daña ciertas células inmunitarias en los pulmones. Esto hace que el profesor Thickett esté más preocupado por la entrega de nicotina directamente a los pulmones a través de productos de vapeo.
